Por Ariel Tolentino
CONSUELO S.P.M.-Desde hace un tiempo he venido siguiendo la serie Dora la Exploradora, no porque yo sea amante a los dibujos animado, sino porque, me quede sorprendido al notar la acentuada estupidez en un personaje tan popular, y en su defecto me propuse hacerle un diagnostico al personaje central junto con los otros actores.
Si hacemos una descripción del perfil psiquiátrico de Dora podríamos decir que está afectada de esquizofrenia ya que esta vive en un mundo en paralelo, totalmente divorciada de la realidad, una niña de 7 años de edad jugando con tus hijos que a lo mejor pueden ser de 3 años.
Dora es una niña autista que vive en su mundo interior utilizando los objetos que siempre lleva con ella: una mochila, un mapa y un mono de peluche. En ese mundo interior piensa que es la protagonista de una serie interactiva con forma de videojuego porque una vez se fijó en uno cuando era pequeña.
Espera en el silencio la respuesta del otro lado, algo que la despierte definitivamente y ‘rompa’ su autismo.
Pero nadie, obviamente contesta, porque realmente su familia inmigrante (ilegal) tiene jornadas de 25 horas al día [24 horas en Canarias] y la dejan abandonada en casa al no poder costearse un centro especializado.
Ese el motivo por el que Dora les ha impuesto un castigo en su mundo alternativo: sus padres y su abuela no tienen nombres, son Mommy, Daddy o Granma…
Los ojos de Dora son de color rojo, tal vez para hipnotizar, estos sin lugar a dudas son muy parecidos a los ojos bajo los que están efectos narcóticos, no solo los de ella, sino también, los de sus padres, los cuales transmiten una conducta de disfuncionalidad familiar, a esto le sumamos a Botas, un mono que carece de identidad, con una voz femenina muy definida y con un pronunciado color afeminado.
¿Es Botas, Varón o Hembra?
Por muchos tiempos hemos estado alertando a los padres sobre el contendió televisivo que ven sus hijos, sin embargo, la televisión por cable ofrece en parte una programación con ofertas de deportes y documentales¸ pero también te ofrece mucha basura, y como los beneficiados no son más que los empresarios de la televisión por cable, nadie dice nada, de manera que existen muchas empresas que utilizan al público infantil como escudo a favor de la promoción de la comida azucarada, causante en muchos casos de obesidad infantil y posteriormente una posible diabetes juvenil, son los mismo empresarios que promueven las narco novelas, la publicidad pornográfica, la brujería, en los horarios matutino y vespertino.
Malditos, la más notaria representación de la clase más asquerosa dominicana, no solo se conformaron con el derrocamiento del Profesor Bosch para quedarse con las empresas que había dejado Trujillo, sino que también han convertido a la República Dominicana en un “mercado persa”.
Pero como vivimos en una serba, llena de funcionarios que no funcionan, es un poco difícil acabar con ese flagelo.
De ahí que debemos empoderarnos e incidir con más fuerza y con más decisión, a favor de la niñez dominicana.